martes, 8 de febrero de 2011

Club Antisocial y Destructivo de los 27

La unión de varios músicos que compartieron un mismo destino; Cuándo se formó, quiénes lo integran y cómo asociarse.

Era de noche, una leve llovizna había caído durante todo el día en la ciudad norteamericana de Seattle. Un joven rubio de ojos celestes y con barba de tres días se encontraba en el baño de algún bar; fumaba indiferente un cigarrillo mientras su mirada brillante se perdía entre las manchas y los graffitis de los azulejos. De pronto, una de las puertas de los baños privados se abrió y el chico pasó. El lugar era bastante incómodo, apenas cabían dos personas. Detrás de una mesa improvisada donde descansaban una botella de whisky y varios papeles se encontraba un señor sentado con un sombrero que impedía distinguir los rasgos de su cara.

–Buenos días, vengo a hacerme socio del club.¿Cuáles son los requisitos?– preguntó el rubio.

–Buenas, los requisitos son muy simples: Ser músico y tener una muerte trágica durante tu vigésimo séptimo año de vida.

–Macanudo. Decime, ¿aceptan suicidios?

–Sí, sí, aceptamos. Tomá, acá te dejo un folletito con la historia del club para que lo leas.

El muchacho agarró el papel y salió sin decir nada. Caminó algunas cuadras hasta llegar a su casa, se sentó en la cama y abrió el folleto:

El Club Antisocial y Destructivo de los 27 se fundó en agosto de 1938 con la muerte de uno de sus miembros más ilustres en el ambiente del blues: Robert Johnson –también conocido como El abuelo del Rock & Roll–. Johnson fue un blusero norteamericano que dejó un legado de tan sólo 29 canciones grabadas, suma más que suficiente para influenciar a músicos como Bob Dylan, Jimi Hendrix, Jimmy Page, Eric Clapton y The Rolling Stones, entre otros. Pero Johnson no había nacido con el don para tocar la guitarra, por contrario, en Robinsonville, el pueblito donde vivía, era considerado un bluesman novato. Un día, Johnson abandonó su casa y se fue a recorrer los caminos con su vieja Gibson acústica. Cuando regresó a Robinsonville, dos años después, se había convertido en un magnífico músico. Robert Johnson murió a los 27 años. Algunas versiones sostienen que falleció de neumonía o de sífilis, pero la mayoría concuerda en que murió envenenado con whisky por un marido celoso que aseguraba que el blusero se había acostado con su mujer.

Muchos creen que su temprana muerte y la destreza que adquirió para tocar su guitarra en menos de dos años se deben a que vendió su alma al diablo en el cruce de los caminos 61 y 49, en Mississippi, a principios de los años ´30.



En mayo de 1969, el jamaiquino Don Drummond –trombonista–, ícono de la música Ska y miembro fundador de The Skatalites, recibió el carnet y la membresía del club al suicidarse luego de pasar dos años recluido en una clínica para enfermos mentales por haber asesinado a su novia. Drummond, a diferencia del blusero norteamericano, grabó más de 300 canciones en a penas 27 años de vida.



Por otro lado, a principios de julio de ese año, el guitarrista de The Rolling Stones, Brian Jones, apareció muerto en la pileta de su mansión en circunstancias que aún hoy resultan poco claras. Jones, que había sido apartado de los Stones hacía menos de un mes, optó por juntarse a zapar con su antiguo ídolo de la guitarra, Robert Johnson.



Si bien todo estaba encaminado –además del blusero, el jamaiquino y el stone, se habían asociado varios músicos más que no fueron conocidos mundialmente pero que cumplieron al pie de la letra con el fatídico requisito de morir con 27 años–, el club se terminó de consolidar con el ingreso de tres miembros fundamentales durante los comienzos de la década del ´70.

En septiembre de 1970, James Marshall, más conocido como Jimi Hendrix, cambió su guitarra por el arpa al tragar su propio vómito luego de una fiesta en la que ingirió nueve pastillas para dormir y mucho alcohol, en Londres, Inglaterra. Hendrix fue uno de los mejores guitarristas, pionero en el uso del wah-wah y fuzz (pedales de efecto para la guitarra), dejó un surco imborrable en la historia de la música con menos de ocho años de carrera y a penas tres discos de estudio editados junto a la The Jimi Hendrix Experience.



Días después de la incorporación de Hendrix, los miembros más representativos de la organización se reunieron y resolvieron que necesitaban un socio mujer, el club se estaba tornando aburrido sin una presencia femenina y optaron por llamar a la primer mujer en ser reconocida como una estrella de rock: Janis Joplin.

Joplin nació en Texas, el 19 de enero de 1943. “Siempre fui un bicho raro, yo leía, pintaba y no odiaba a los negros”, declaró alguna vez la cantante sobre sus días de escuela. A los 16 años ya era habitué de los bares de Louisiana, donde comenzó su relación con el alcohol y la música. En el ´63 se mudó a San Francisco, allí creció su popularidad como artista y también empezó a consumir drogas. En 1970, luego de la separación de su última banda, Kozmic Blues Band, Joplin viajó a Río de Janeiro para intentar limpiarse de la heroína que se había tornado incontrolable. El 4 de octubre de ese año, luego de una sesión de grabación para su disco "Pearl", la cantante salió de copas para festejar. Su cuerpo fue encontrado 18 horas después de su muerte. Según un médico forense, Janis Joplin falleció por una sobredosis de heroína a los 27 años.


El miembro más polémico que se asoció al club fue Jim Morrison –cantante de The Doors–, mundialmente conocido como El Rey Lagarto. Morrison nació en 1943, fue un poeta introvertido que cuando comenzó su carrera como vocalista cantaba de espaldas al público por el miedo escénico que padecía. En 1971, El Rey Lagarto decidió abandonar The Doors cuando el grupo estaba atravesando su momento de mayor popularidad y se recluyó en Paris, Francia. El 3 de julio de ese año, Morrison fue encontrado sin vida. Las versiones sobre su muerte varían, algunos creen que murió por un ataque cardíaco en el baño de su casa mientras que otros afirman que falleció de una sobredosis en un bar. El cuerpo de Jim Morrison fue visto solamente por su novia, Pamela Courson, y un médico. Existen datos que ponen en duda la adhesión del cantante al club, algunos aseguraron que todo esto fue un montaje y lo vieron en algún antro de Los Angeles después de su muerte.



El rubio cerró el folleto y lo dejó a un costado, se prendió un cigarrillo y se puso a pensar en todo lo que había hecho. Sin duda, una de las cosas más importantes fue formar su banda a fines de los `80, la banda que le cambió la vida. El éxito que logró alcanzar el grupo con su segundo y tercer disco de estudio ya no lo emocionaba.

El muchacho se incorporó, agarró un lápiz, una hoja y se sentó a escribir. Al terminar la nota fue en busca de su escopeta y la cargó.

Tres días después, el 8 de abril de 1994, un empleado que iba a instalar un sistema de seguridad descubrió que Kurt Cobain, líder de Nirvana, había decidido juntarse con sus antiguos colegas. De esta manera se convirtió en la última gran estrella de rock en sumarse al Club Antisocial y Destructivo de los 27.



***Nota publicada en la revista virtual www.santuariock.com.ar***


4 comentarios:

  1. muy bueno guidi, lo voy a compartir en fb

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  2. Genial Doggy, no había leído esta. es muy bueno posta

    Algunos ya sabía que integraban el grupo, pero no tenía idea de Janis! Por las fotos y videos que había visto siempre aparentaba que era una mina de, no sé...35 pirulos, por lo que jamás pensé que integraba el grupo selecto. Taba hecha mierda Janis jaja...

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  3. Un miembro más para el selecto club: la cantante de etílico apellido Amy Winehouse.

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